New york, es una película. Es algo extraño. Como un gran decorado de una superproducción. Pero no, todo era real. Los buzones, los rascacielos, las salidas de agua para los bomberos, las escaleras de incendios fuera de los edificios, los taxis amarillos, los grandes musicales, el metro, ..... Sin duda muchos rincones de esta gran ciudad recordaban a alguna película.
Paseos. Eternos paseos por los barrios más y menos conocidos de la ciudad. Y sobretodo la diversidad de cultura, raza, religión, que te ofrece como escaparate Nueva York.
No olvidemos Central Park, como contraste a una ciudad tan movida y estresada. Un grandioso parque entre tanto rascacielo. Nueva york, algo distinto, parecido a mágico, o quizás extraño, viejo con falsa apariencia de nuevo, .........algo de película.
Más o menos esto es una idea de nuestras medias vacaciones. Donde pasear en una ciudad mágica con alguien mágico de la mano ha sido el mejor regalo de estos 5 años.